Campo en El Galpón (un año después)

A un año de la edición de su disco debut, Campo decidió cerrar doce meses cargados de emociones con un show en el Teatro El galpón de Montevideo que no hizo más que reafirmar la resaltable profesionalidad con la que se ha movido Juan Campodónico en cada proyecto. Fotos: Miguel Juncal

Con la misma dedicación con la que Juan Campodónico produce cada disco que cae entre sus manos, el artista y su gente crearon un espectáculo donde cada movimiento aparece como llevado a la máxima perfección.

La puesta en escena fue sobria y ajustada al marco que les daba la Sala teatral, destacándose una pantalla sobre el fondo y un vestuario para todos los integrantes masculinos del grupo basado en camisas de tenues colores y de cuello blanco. Otra forma de estar presente en los detalles.

A un año de la edición de “Campo”, el disco debut de Juan Campodónico, el espectáculo vino a cerrar una etapa del artista altamente positiva. El proyecto que comenzó siendo el debut solista de uno de los miembros pilares del Bajo Fondo, terminó siendo un colectivo de artistas que conformaron finalmente a Campo, como un grupo más, extraído de las raíces del Bajo Fondo pero con una identidad propia y definida. Así es que los miembros de Campo a los cuales su líder Juan Campodónico fue presentando a lo largo del show, no son más que un proyecto en concreto de uno mucho más grande que empezó a rodar 10 años atrás.

Todo Campo estuvo en escena pasadas las 21 horas, con la batuta de Juan Campodónico en voz y guitarra y toda su gente, Martín Rivero en voz y guitarra, Luciano Supervielle en teclados, Verónica Loza en voz y vj, Gabriel Casacuberta en bajo y contrabajo, Pablo Bonilla en programaciones, Martín Ferrés en bandoneón, Javier Casalla en violín, y Roberto Rodino en batería. A sala repleta y bajo unos cálidos aplausos se largaron con todo arrancando con ‘Across the stars’, una de las canciones del disco “Campo” interpretada por Martín Rivero, acto seguido se adelantó al centro Verónica Loza para interpretar ‘Naranjo en flor’, uno de los clásicos más aclamados de Bajo Fondo. Esto marcaría la rutina del show, que incluiría canciones del disco “Campo” más algunas del Bajo Fondo y un par de “rarezas”, tal como definió el propio artista a la canción que precedió a una versión acotada y tranquila de ‘1987’ el actual éxito de la banda.

Allí fue hora de dar la bienvenida al público asistente por parte de Campodónico y agradecer su presencia, resaltando el hecho de haber pasado “un año increíble, donde a Campo le pasaron un montón de cosas” y aludiendo a la elección de culminar ese año tocando en Montevideo.

Tras las primeras palabras fue el tiempo de ‘Turn on the lights’ interpretada en la ocasión por Martín Rivero, que sirvió para redondear esos primeros momentos del show donde el público permanecía con una mesurada algarabía observando el espectáculo. Mesura que culminara apenas Campodónico manifestó a su público que si querían podían bailar y arrancaron con ‘La marcha tropical’, el mayor éxito que dejó el disco hasta el momento y que llevó a Verónica Loza nuevamente hacia el centro del escenario desde donde interpretó la canción con toda la energía que la caracteriza y acompañada además por las palmas de los asistentes entre los cuales algunos hasta se animaron a tirarse unos pasitos.

La canción estuvo enganchada para sorpresa de todos, pero la sorpresa no fue el hecho de haber sido enganchada sino la presencia en escena de Roberto Musso, el doble ganador del Grammy Latino por “Porfiado” disco que fue producido por el mismísimo Juan Campodónico, y ganador por haber escrito la canción ‘Cuando sea grande’. Este hecho fue resaltado por el líder de Campo. Fue así que a ritmo de marcha tropical Roberto interpretó ‘Bipolar’, la canción que dio nombre a su anterior disco, el que también fuera producido por Campodónico. Este fue uno de los momentos más aclamados de la noche.

Y tras este momento, llegó la hora de la tranquilidad previamente anunciada por Campodónico, y arrancó con ‘Zorzal’ uno de los temas instrumentales del disco “Campo” donde el silbido y las palmas parecieron combinar. Luego se produjo una nueva vuelta al centro del escenario de Verónica Loza y fue para interpretar ‘Tuve sol’, una melodía compuesta por ella y que integrara “Mar dulce”, el hasta el momento último disco del Bajo Fondo.

En ese mismo plan de canciones personales, fue que Martín Rivero interpretó ‘Carmesí’, una canción escrita por él para su disco solista “Estas cosas no son mías”, con algunas palabras previas de Campodónico sobre él y su pasado en Astroboy, aquella banda nacional que integró al rock uruguayo el brit-pop de comienzo de siglo hace casi una década.

Ese momento intimista fue propicio para que el líder de Campo brindara algunas palabras entre las que además de agradecer al público asistente, hizo mención a lo particularmente importante que era para él tocar allí, dado que la Sala de El Galpón donde se realizaba el show llevaba el nombre de su padre, el actor, director y uno de los fundadores del Teatro César Campodónico, hecho éste que hacía que Juan se sintiera “como tocando en casa”.

Fue tiempo entonces de mezclar el pasado con el futuro, y así fue que interpretaron primero ‘Corazón’, uno de los éxitos del primer disco de Bajo Fondo al cual le siguió un adelanto de lo que será el nuevo trabajo del colectivo a editarse en marzo de 2013.

En esa alternancia tan particular como importante que se fue dando en la noche entre los distintos vocalistas, fue el turno de Martín Rivero quien interpretó ‘Devil waits (for me)’, dejando luego su micrófono para que Campodónico protagonizara ‘Mareo’, otro de los éxitos de “Mar dulce” donde en su versión original fuera interpretada por Gustavo Cerati a quien el artista recordó.

El spring final vino de la mano de tres canciones del disco “Campo”, una de las mejores como ‘Heartbreaks’, ese electro-pop que lleva adelante Martín Rivero y que sirvió como para ir aumentando la intensidad hacia el momento del baile final que llegó con ‘Cumbio’ donde toda la Sala se puso de pié y empezó a palmear y a bailar. Baile que no pudo dejarse a un lado cuando se largaron con todo haciendo una versión sumamente bailable de ‘1987’, el actual éxito del disco “Campo” en cuya versión original participa Jorge Drexler y que en la ocasión los vocales recayeron sobre el propio Juan Campodónico.

Claro que terminar un espectáculo con todo el público de la Sala de pié bailando y aplaudiendo lleva por consiguiente el hecho de que los bises no puedan hacerse esperar ni mucho menos dejarlos a un lado, y así fue.

Pues la vuelta estuvo asegurada con el clásico bajofondista ‘Pa bailar’ que llevó a Martín Ferrés y Javier Casalla al frente con sus instrumentos y a pura electrónica cerraron una noche que sirvió para cerrar el primer año de “Campo” y reafirmar algo que no necesita confirmación, y es que la presencia de Juan Campodónico en un proyecto es una garantía de profesionalidad y un viaje sin necesidad de traslado hacia ningún país para presenciar un show de caracteres internacionales.

Es que en cierta medida se puede decir que Campo es hoy por hoy, la música del mundo hecha para apreciarla sin necesidad de moverse del paisito.

Fernando García

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