ANCEL FEST: La primera edición de un festival que promete repetirse

El 17 y 18 de octubre se llevó a cabo la 1era. edición del «Ancel Fest» en el Velódromo de Montevideo. En dos noches de rock and roll, miles de personas llenaron el Velódromo. Artistas de diferente trayectoria y de varias partes del mundo llegaron para ofrecer junto a los nuestros sus respectivos shows.

DIA 1

marky-ramone-15.jpgCon un rejuntado de músicos «amigos» donde sobresalía la presencia de la guitarra de la Trotsky Hugo Díaz, el ex baterista de la banda de punk rock más grande de la historia Marky Ramone se presentó por primera vez en vivo en nuestra capital. Si bien el artista solo estuvo un par de años en la banda The Ramones, vale decir que cada uno de los músicos que pasaron por la banda tienen esa chapa que es ineludible mostrar para tener un momento de gloria asegurado en nuestro país.

En el show que abrió el festival, Marky Ramone & Friends nos llevaron de repaso por varios de los éxitos de la recordada y extrañada banda neoyorkina. ‘Pet Cemetery’, ‘Do you remember Rock & Roll radio?’ y ‘I just wanna live’ sirvieron para entrar en confianza con un público que primero lo miró con desconfianza y luego se largó a saltar. Una vez en la batería, Marky y sus amigos sumaron a la lista de éxitos recreados ‘I wanna be your boyfriend’, ‘Komandos’ y hasta una versión de ‘What a wonderful world’, el clásico de Lois Amstrong que Joey Ramone interpretó en el que fuera su único disco solista allá por 1998.

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Un final a todo trapo con ‘Blitzkrieg Bop’ y el ritmo de «hey ho let’s go» sellaron con una presentación más que aceptable de otro de los músicos que pasaron por la mítica banda de Joey, Johnny y Dee Dee Ramone que marcó y que a ojos vista, siguen marcando a diferentes generaciones de jóvenes en nuestro país.

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Carlos Vives, Juanes y Fonseca son 3 artistas colombianos que poco tienen que ver con 3 de Corazones. Los primeros tres han conquistado Latinoamérica por lo que hemos pensado que eso era Colombia, sin embargo los últimos 3 hacen rock de ese que no imaginábamos pudiera venir de aquellas tierras. La globalización no soluciona todo, a veces es un instrumento para que sepamos lo que quieren que sepamos, y en este caso pasa que nos presentan en un festival donde el punk rock domina ampliamente la grilla de artistas, un grupo colombiano y todos sospechamos. Pero el trío caribeño 3 de Corazones no desentonó y llevó a cabo un llevadero espectáculo de unos 40 minutos, donde si bien no se consolidaron ni mucho menos entre nosotros, por lo menos nos dejaron en claro que en la tierra de Valderrama también existe la distorsión.

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Para hacer mover a la gente y calentar la noche del viernes fue necesario esperar al tercer show, cuando subió la Trotsky y con su clásico a cuestas ‘Todo puede estar mucho peor’, nos mostraron lo mejor que se podía estar después de los shows precedentes.

trotsky-vengaran-2.jpgTocaron alrededor de una hora, hicieron algunos de sus clásicos, algunos chistes, algunos insultos y hasta tuvieron tiempo para regalarnos un estreno.

‘Otra vez’, ‘El Alma en dos’, ‘Los secretos del dolor’ y ‘Detrás del Arco’, sonaron como suenan esas canciones que con los años se vuelven ineludibles en la carrera de un grupo.

Entre los reiterativos gritos de «gordo puto» provenientes desde el medio del pogo y que a esta altura ya se han hecho costumbre en cada presentación grande del grupo,  hubieron algunas palabras de Peluffo, que más allá de rechazar las acusaciones y pedir que cesaran porque su hija se estaba confundiendo con él, nos alertó de la salida de un nuevo disco de la banda que estará en la calle en este mes, y del cual nos adelantaran en vivo la que será el primer corte de difusión ‘Suicidándote’. Una canción con pinta de hit y claras influencias del rock cincuentón que seguramente pronto sonará por todos lados.

trotsky-vengaran-3.jpgLos momentos más aclamados y pogueados de la noche estuvieron cuando la banda interpretó ‘Historias sin terminar’‘Hay que saltar’ y cuando cerraran la noche como de costumbre con ‘Un beso y una flor’, con la previa presentación de la banda y la aparición del «vengador anónimo», héroe del rock que surgió tras la presentación de «Hijos del Rigor» hace algún tiempo atrás.

Así pasó por el «Ancel Fest», la banda que supo estar arriba y abajo, tener éxito y fracasar, y que más allá de todos los momentos, instauró la idea de pogo en el público; idea tan codiciada y tan controversial a la vez por parte de todos los actores del medio artístico.

hereford-21.jpgLa segunda banda local de la primer noche del festival subió algunos minutos después y fue Hereford, que con la guitarra estridente de Chirola y su hit ‘Volver a empezar’, agitaron en gran forma el Velódromo. Con un show que tuvo buenos momentos y de los otros, el cuarteto logró la atención de todos cuando algunos de sus clásicos fueron cayendo; ‘Límite Perpetuo’, ‘La Corona del Rey’, ‘Estrellita’ y ‘Cierto’, tuvieron una importante respuesta en la gente, ‘Hombre de atrás’ dedicada a Guillermo Peluffo y ‘Turbulencia’, especial para fanáticos, sirvieron para aguantar el frío de la noche.

Pero el momento más interesante de la noche fue cuando Chirola en uno de esos impulsos a los que nos tiene acostumbrado, bajó hacia la tribuna y tomo a una fan (Katy), y la llevó hacia el escenario. La chica entre llantos y nervios se sentó junto a su ídolo a los pies del escenario y ambos interpretaron la canción elegida por los fans mediante votación de sms para cerrar el show; la canción fue ‘La más simple de las cosas’, y seguramente fue una de esas cosas que Katy no se olvidará por mucho tiempo, y que el público supo disfrutar por un rato.

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Con un pequeño impass, volvieron tras la ida para el bis, y no podía ser otro; ‘Bienvenida al show’ el mayor éxito y mejor tema de la banda los despidió del festival entre gritos y aplausos.

La primera noche de la primer edición del Ancel Fest fue cerrada en gran forma por Catupecu Machu que hizo un show excepcional. Qué decir excepcional, fue un show increíble!.

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La verdad que pocas veces por no decir nunca había presenciado como el carisma de un tipo puede cambiar el rumbo de una noche. Porque más allá del pogo de la Trotsky, y las buenas intenciones de Hereford, (dejo de lado la desconfianza con la que el público participó de los shows de Marky Ramone y de 3 de Corazones); el público, que estuvo lejos de llenar el Velódromo en la noche del viernes, había permanecido en su mayoría indiferente al espectáculo. Pero fue aparecer Fernando Ruiz Díaz y los suyos, y el show se transformó en un «espectáculo». Quizás por la diferencia de lo que podría ser un show local a uno internacional, quizás por que el público venía preparado para ellos, o quizás simplemente porque Catupecu es una de las tres bandas más importantes de la Argentina surgida en los últimos 15 años, y su show es una muestra de por que es así.

Las primeras canciones fueron como para marcar el territorio; el virtuosismo de Fernando con su guitarra inalámbrica hizo dejar de bocas abiertas a más de cuatro, digamos miles. Y cuando ya nadie dudaba de que se estaba frente a una gran banda, llegaron los éxitos.

‘A veces vuelvo’, fue cantado desde su comienzo por el público con la batuta de Fernando que le marcaba los tiempos. Cuando el público aún deliraba llegó ‘Entero o a Pedazos’ para dejarlos precisamente así; obviamente que para los que quedaron enteros, la banda interpretó ‘En los sueños’ y estuvo todo hecho; el público estaba en el bolsillo del carismático líder.

catupecu-machu-22.jpgEl momento de emotividad llegó cuando Fernando habló de su hermano Gabriel, que aún está en estado de recuperación tras el accidente de tránsito sufrido en marzo del 2006 y que lo dejó «transitoriamente» imposibilitado de continuar con su vida normal. El cantante hizo mención cuando con su hermano se presentaron por primera vez en nuestro país, siendo como dijo el Uruguay el primer lugar que se presentaron en el extranjero cuando comenzaron hace cerca de diez años; nos dijo que le había comentado a «Gaby» que venía a presentarse acá y que había quedado muy contento, y tras cartón interpretó la canción que escribió pensando en su hermano y que naciera a partir de un sueño donde se veía junto a él como antes; la canción es ‘Viaje del Miedo’ y fue incluida en el disco que la banda editó el año pasado «Laberintos entre aristas y dialectos».

Otro momento memorable del show fue la interpretación de ‘Magia Veneno’, por lo contagioso de la melodía, por lo popular de la canción y por que se trata de una de las mejores canciones de la década del rock latino. ‘Dale’, canción que los dio a conocer en el 97 y que dio nombre a su disco debut, electrizó la noche del Velódromo y ‘Origen Extremo’ con un Fernando Ruiz Díaz liberado de la guitarra y desplegando energía por todos lados, fue el broche de oro a un show inigualable.

catupecu-machu-43.jpgClaro que hubo tiempo para un bis, y la canción elegida fue el éxito del año 2000 ‘Y lo que quiero es que pises sin el suelo’; y si como había dicho Fernando la anterior nos iba a hacer saltar, ésta nos iba a despegar directamente del suelo. Y así fue.

Fernando Ruiz Díaz en guitarra y voz, Sebastián Cáceres en bajo, Macabre en teclados y Javier Herrlein en batería pasaron así por el Velódromo, marcando a fuego el festival y dejando el nombre de los Catupecu rondando en las cabezas de miles de aficionados. Por suerte.

DIA 2

El segundo día del Festival fue abierto por la banda nacional Graffolitas, quienes en un show de unos 40 minutos repasaron parte de su obra que cuenta a nivel de ediciones con dos discos.

La presentación quizás fue algo fría, y el tiempo quizás tuvo que ver, primero el climático, luego el solar ya que cuando arrancaron a tocar aún era de día, y el horario, dado que al ser los primeros y teniendo en cuenta que los uruguayos siempre llegamos tarde; bueno. Igual la presentación valió la pena de ver, ya que se trata de una de las bandas que más la ha peleado para hacerse un lugar en el medio. En el show repasaron básicamente las canciones de su debut del 2004 «Pobre S. A.», cerrando con uno de sus éxitos ‘Tiempo al Perdedor’. Se despidieron, hicieron la invitación para la presentación de su disco «Mutuatatú» en el Central, y en definitiva. Supieron cumplir.

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Tras los duraznenses y con apenas unos minutos de espera, subieron al escenario los españoles de Reincidentes. La banda que lidera Fernando y que tiene una trayectoria que ronda los 20 años es una de las bandas españolas que más ha influido a las bandas del nuevo rock nacional surgido de los 90’s para acá, (incluyendo a los Graffolitas); sin embargo, es prácticamente desconocida en nuestro medio, y las pruebas se vieron en el festival, donde más allá de un puñado que rondaría las 50 personas, el resto los miró y aplaudió concierta indiferencia.

reincidentes-6.jpgLos españoles se brindaron al máximo, cantaron sus temas más representativos, agradecieron al público, hablaron de las ganas que tenían de tocar en nuestro país, y hasta interpretaron la canción ‘Tablas’ original de Dino que la banda realizó en uno de sus últimos discos.

Cerraron con ‘La Republicana’ y se despidieron hasta una próxima vuelta que esperemos se de algún día, y que cuando ese día llegue, el público esté mejor preparado.

Pocos minutos después que los españoles bajaran del escenario, subió otra de las bandas locales que han sentido su influencia, La Chancha. El hoy power trío liderado por Juan Berbejillo irrumpió con su estilo característico y ya desde el comienzo con la canción central del programa «La Pua» y un grupo de fan preparados para poguear, la banda realizó un escueto pero sustancioso show.

la-chancha-8.jpgClásicos del grupo como ‘Cuentas y cuentos’ y ‘Axidente’, en una versión más rockera de la original, contagiaron al público en general.

Un momento resaltable del show fue cuando Juan invitó a subir al escenario al líder de Reincidentes Fernando, para interpretar juntos la canción ‘Comerse un Buey’, que los españoles versionaron en su último disco «América de Ida y Vuelta».

Durante el show hubieron palabras de Berbejillo a esta altura características de él, que matizaron las canciones con un tono de polémica. Habló de apoyar a los artistas más allá de los grandes festivales, y sin importar si detrás de la presentación hay una gran marca apoyando. Una actitud muy rocker e interesante, pero a esta altura deberíamos más que criticar, agradecer a las marcas que siguen apoyando el movimiento artístico local en las buenas y en las malas.

El show se cerró con la canción más aclamada del grupo, ‘Todos queremos formar parte del show’, tema que dio nombre a su disco del 2000 y que critica esa mala costumbre que tenemos de pensar que «somos» cuando figuramos.

Tras el final, una pequeña retirada y una vuelta para los bises; ‘Pan y Circo’ y ‘Algo nos está saliendo mal’ cerraron definitivamente la presentación de una de las bandas más «sinceras» de nuestro querido rock nacional.

Sin duda que el festival tuvo dos presencias excluyentes venidas del exterior; una fue la de los Catupecu el día viernes y la otra fue la de Loquillo el día sábado. Es que más allá que el español no haya sido nunca un artista popular en nuestro medio, la grandeza de su nombre no puede escapar al público entendido. Estar frente a Loquillo es estar frente al cantante de rock más grande de la historia de la madre patria, y eso es sin exagerar. Por si alguno de los presentes podría dudar de tal afirmación, seguramente tras la presentación del español seguramente no le habrán quedado dudas.

Con una banda de músicos internacionales y «lookeados» según ha sido característico en la trayectoria del artista con su anterior banda Los Trogloditas, apareció el Barcelonés en escena mostrando toda su porte de caballero español y su grandeza que no se remite solo a 2 metros de altura.

loquillo-1.jpgDe adentro le salió decir «por fin», dadas las postergaciones de su presentación en nuestro país en más de una ocasión, y de adentro le salieron las canciones de su vida.

Arrancó con ‘Rock & Roll actitud’, su clásico ya del 2004 y siguió con varias de sus canciones de los 80’s y 90’s. ‘Animal de Rock & Roll’ fue una de las que más pegó, y ‘Cruzando el Paraíso’, escrita tomando como base textos de Sam Sheppard, trajo cierta calidez a la noche sabatina.

La canción que dio nombre su penúltimo disco ‘Arte y Ensayo’ hizo mover a todo el público asistente y ‘Rock Suave’ los tranquilizó y apuñaló con una guitarra cruda y constante.

Le dedicó a Carlos Faral la interpretación de ‘Cuando fuimos los mejores’, una canción cargada de emotividad incluida en el disco «Cuero Español» que sacara el artista junto a Los Trogloditas en el año 2000, y luego vino lo memorable de su show. Primero la interpretación de su mejor canción ‘El Rompeolas’, y luego con el previo agradecimiento a Buitres por haber hecho más grande su canción, terminó con el ‘Cadillac Solitario’ con el cual se metió al público uruguayo definitivamente en su bolsillo.

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Así pasó Loquillo por Uruguay, dejando a quien habla con esa interrogante de pensar que se estaría pasando en las radios uruguayas cuando el español tenía tanto por promocionar.

La primera edición del Ancel Fest tuvo su broche de oro, con la presentación de la banda Buitres.

Hay que decir que una de las cosas que caracterizó el festival fue la puntualidad en los horarios pactados y promocionados; la excepción se dio previo a la salida de Buitres. Lamentablemente los problemas de sonido, o algo así, hicieron que la banda se retrasara en casi una hora en salir al escenario.

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La presentación fue digna de presenciar, aunque vale decir que no estuvo a la altura de otras presentaciones de la banda, quizá los problemas ocasionados antes de la subida distorsionaron en algo la cabeza de Parodi, que parecía no estar con el humor acostumbrado. De todas formas, y aunque uno tenga el corazón en esta banda, siempre es bueno ver a Buitres más allá de los detalles que pudieran haber surgido.

buitres-36.jpgTras una intro palmeando el coro de ‘Canción de cuna’, que pareció hecha a medida como para probar que todo estaba en orden, el show se largó con ‘El Cazador’, y a partir de ese momento se dio lo que se da con muy pocas bandas en el medio : «una canción = un hit». La muestra de eso fue la lista de canciones; ‘El baile del Caballo / Nunca cantaron mejor’, ‘Canción de Navidad’, ‘Soy del Montón’, , ‘No te puedo matar’, ‘Ojos’, y ‘A Cartas Vistas’, hicieron cantar y moverse a todo un Velódromo,  ‘Final’, ‘Carretera Perdida’, y ‘Mincho bar’, le dieron cierta tranquilidad a un agite constante.

Obviamente no faltaron los nuevos éxitos, los salidos del último disco, ‘Días Mecánicos’, ‘La Oportunidad’, ‘Canción de Cuna’ y ‘Ciclo’, la canción buitrera con mayor aire «Estómago», que la banda interpretó pegado a ‘Frío Oscuro’, un clásico de Los Estómagos del año 86.

buitres-22.jpgY fue precisamente con un tema de la histórica banda de Pando que cerraron el show; fue con ‘Avril’, canción que resultara la más votada por el público asistente a través de los sms.

Un show que había sido bueno y cerrado en buena forma; pero aún faltaba lo mejor. Luego de un par de minutos volvieron con los bises, que tuvo tras el fervor despertado por la interpretación de ‘Besos’, el encuentro anhelado.

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En el año 2003 y iniciativa del sello Koala, la banda decide reeditar su mejor disco, el «Rantifusa» originalmente editado en el año 98 para el sello Dakkar. Con un mejor sonido y algún retoque en el arte, el disco contenía como bonus una versión del clásico de Loquillo ‘Cadillac Solitario’. El tema se convirtió en uno de los más grandes éxitos de la banda y su extensiva difusión llegó a oídos del propio Loquillo. De allí en más los lazos se extendieron, y tuvieron como desenlace que cuando la banda uruguaya se presentara en Barcelona, el propio Loquillo los ubicó, resultando de ese encuentro una interpretación a medias de la canción.

buitres-5.jpgCuando en «La Fiesta X» del 2007, el español estaba en la grilla de presentaciones al igual que los uruguayos, todos se frotaron las manos para que el encuentro redundara en una presentación en conjunto para la interpretación del clásico. Pero la lluvia lo impidió.

Finalmente el postergado encuentro se da en el Ancel Fest. Gabriel Peluffo invita al «Loco» (como él lo llamó), a subir al escenario y juntos interpretan ‘Cadillac Solitario’ acompañados de la emoción y miles de voces que cantaron junto a ellos. Sin duda fue el momento más memorable del festival; ese que por lo histórico hará que todos lo recordemos con el correr de los años.

Luego de ese encuentro era como para cerrar e irse; pero cuando se trata de Buitres no está dicha nunca la última palabra. ’70 Puñales’, ‘Ojos Rojos’ y ‘Te llevo en el Sentimiento’ sonaron hasta casi partir el Velódromo, que terminó por destruirse cuando la banda se largo con su himno ‘Buitres’ y ahí si, para bien o para mal, el cielo tuvo que esperar.

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Fernando García

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